Gracias Rufus por haber sido el mejor conejo del mundo, por haber estado casi 9 años y medio a nuestro lado, siempre siendo tú; un bichito.
Eras tan guapo y tan suave como travieso pero siempre con buenas intenciones.
Te quiero mucho, espero que ahora estés feliz, y sobre todo, sin dolor ni sufrimiento. Espero que guardes un buen recuerdo de nosotros y que hayas tenido una buena vida. A ver si te encuentras con Chiki y lo empezáis a morder todo.
Ha sido un honor, un placer, un privilegio tenerte y cuidarte. Te echo muchÃsimo de menos, tengo el corazón roto y, en estas circunstancias es todo más extraño. Me va a costar hacerme a la idea de que no vas a estar cerca de mà nunca más.
Gracias Rufus por haber existido y formado parte de mi vida.
TE QUIERO.